domingo, 5 de mayo de 2019

Segundo intento al Ama Dablam

En el campo base, momentos antes de comenzar la aproximación al C1

El día 29 salimos del campo base con intención de hacer cima el día 1. Con una buena previsión meteorológica (aunque daban algo de viento) y en buena forma, nos sentíamos muy motivados para hacer cumbre. Ascendimos los 1.200m de desnivel entre el CB y el C1 mucho más cómodos que la anterior vez, ya que conocíamos el camino y además la mochila era más ligera.

De camino al C1

C1

C1

Al día siguiente escalamos hasta C2, recorriendo la ya conocida arista rocosa. Esta vez escalamos con las zapatillas de aproximación y las botas en la mochila, lo que nos permitió ir más rápidos y seguros durante la escalada. No había plataformas libres en C2 para montar nuestra tienda, así que nos metimos en una de las que estaba libre para descansar unas horas, pues teníamos pensado despertarnos a las 12. Por supuesto no tocamos nada que no fuese nuestro, simplemente usamos el espacio.
Primeras trepadas del día, todavía sin encordarnos

Malangphulang, Kangtega y Thamserku al fondo 

Primeros largos

A las 5 de la tarde estábamos ya en el saco, intentando aprovechar al máximo las horas de descanso. Dormimos a ratos, y a las 12:30 empezamos a hacer té. Salimos sobre las 2 de la madrugada; ni rastro de luna que iluminase la montaña, así que las frontales eran nuestra única fuente de luz en aquella inmensa oscuridad. Comenzamos escalando la torre gris, por un terreno mucho más técnico del que esperábamos; según aita, nada que ver con otoño del 95. Tuvimos que esforzarnos al máximo, montando reuniones donde habíamos pensado escalar en ensamble, lo que nos ralentizó bastante. Además, al poco de empezar nos dimos cuenta de que no teníamos batería en ninguna de las dos cámaras, así que no hay imágenes de aquel día. Una pena, pero a veces se falla en lo más obvio. Llegamos a la arista del mushroom con los primeros rayos de sol, después de unos 300m de escalada mixta exigente. Pensábamos que esta sección sería un mero trámite para llegar a la altura del C3 (6.300m) y afrontar los últimos 550m, pero resultó ser un recorrido entre seracs con algunos largos de hielo de 60-70º y varios resaltes de 90º que nos obligaron a escalar más de lo esperado.

Tras varias horas de escalada, estábamos en el C3. Habíamos tardado más de lo previsto por las condiciones de la montaña, mucho más técnica de lo que creíamos, pero estábamos con fuerzas y hambre de cima.
Un pequeño descanso y empezamos a escalar. Esperábamos una rampa de nieve mantenida de entre 50 y 60 grados de inclinación, pero nos encontramos con una plancha de hielo estalladizo, el cual se rompía cada vez que le dabas con el piolet, haciendo la escalada muy trabajosa. Además, no había descanso para los gemelos, que se empezaban a quejar.
Malangphulang

Nos quedaban unos 400m para llegar a cumbre, y ya eran casi las 2 del mediodía. Vistas las condiciones, calculamos que podríamos hacer cima sobre las 5 de la tarde, pero lo que más nos preocupaba era el descenso. No teníamos material suficiente para bajar con seguridad y en un tiempo razonable, y sabíamos que si seguíamos hacia arriba nos esperaba un largo y complicado descenso por la noche. La decisión era complicada; la cima no estaba muy lejos, y eramos conscientes de que el tiempo empeoraba para los próximos días, así que no sabíamos si otro intento sería posible. Yo estaba motivado para seguir hasta la cumbre, pero aita rápidamente me hizo ver que era demasiado arriesgado. Tomamos la decisión de bajar, intentando mantener la cabeza fría en aquella situación.
Llegamos a C2 justo antes del anochecer, derretir nieve, beber, cenar y a dormir. Al día siguiente, con la calma, bajamos hasta el campo base, dejando material arriba para el próximo ataque.
C2

Ayer día 3 recibimos una muy agradable sorpresa que nos alegró el día, que empezó con bajón por la retirada y el mal tiempo. Rubén, Ana y Ángel, que van a intentar abrir la cara norte del Lobuche Oeste, vinieron a hacernos una visita al campo base, sin ni siquiera saber si estaríamos o no. Pasamos unas cuantas horas hablando en la tienda comedor, repasando todo tipo de temas de actualidad desde alpinísticos a políticos, comimos juntos y hasta abrimos una botella de crianza. No hay nada mejor que un día de mal tiempo de campo base para recibir tal sorpresa y charlar sobre proyectos futuros. Muchísima suerte en vuestra apertura!! Nos vemos a la vuelta para celebrar ambas escaladas.

Vamos justos de tiempo, ya que el 8 es nuestro último día de campo base. Hemos pensado cambiar la estrategia para el siguiente intento, haciendo la noche anterior al ataque a 6.300m y así intentar asegurar la cima, aunque el desgaste sea mayor, ya que tendremos que cargar con todo hasta C3.
Esperemos que el tiempo (y especialmente el viento) nos respete y podamos aprovechar nuestra última opción de cima.

4 comentarios:

  1. Aupa mutilak!! Hemen irrikitan zuen kronikak irakurtzen . Ea azken aukeran mendiak baimena ematen dizuen!! Besarkada bana Amurriotik eta ez ahaztu bateriak kargatzen!!! Egurre

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  2. A la tercera va la vencida. Aúpa ahí!!!!

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  3. Pura vida no se puede pedir mas... Eso es darlo todo, Zorionak bikote!!!

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